El Kit Del Hogar diseñada por Julian Rothstein, fundador de Redstone PressHace algún tiempo, un adolescente llamado Lucien Rothenstein hizo una señal para que la puerta de su dormitorio que decía: «Estoy bien, sólo sigue adelante con tu propia vida». Señales de este tipo no es probable que pasen desapercibidas, y como sucedió, Lucien llamó la atención de su padre Julián, quién resulta ser el fundador de Redstone Press,una de las editoriales más inventivas que operan en el Reino Unido.El anciano Rothenstein se inspiró para diseñar sus propias ingeniosas tarjetas para los pomos de las puertas, en las que en unas pone por delante: Y las llaves? Y en la otra: Y el teléfono? En otra por ejemplo en una cara : Y el sentido del humor? Y en la cara de atrás: «Limpieza en curso». Más tarde, en colaboración con el periodista, escritor y traductor Will Hobson, ideó un excéntrico manual-juego-novedad para el hogar y lo acaba de sacar a la luz. Se llama «El Kit de los Hogares». Una especie de Kit excéntrico creativo de uso doméstico.
A la postre, parece que la idea original que tuvo Lucien en su día no está reflejada dentro del pack, pero aún así, dentro hay consejos e ideas sorprendentes para todo el mundo: direcciones y mapas para transformar el hogar en una cueva budista, en un estudio de un artista o en un centro comercial, notas para leer uno mismo, con aforismos diarios,y tarjetas para colgar en el pomo de la puerta para advertir si uno se encuentra durmiendo o de mal humor.
Some time ago a teenager called Lucien Rothenstein made a sign for his bedroom door that said: ‘I’m fine, just get on with your own life’. Signs like this aren’t likely to go unnoticed, and as it happened, Lucien’s caught the eye of his father Julian, who so happens to be the founder of Redstone Press, one of the more inventive publishers operating in the UK.
The elder Rothenstein was inspired to design his own, similarly cheeky doorknob cards – one that says ‘Keys? Phone? Sense of humour?’ on one side and ‘Cleaning in progress’ on the other, for instance. Then, in collaboration with the journalist, writer and translator Will Hobson, he devised an eccentric household manual-game-novelty and has now published it in a package he called the Household Box.
As it turns out, Lucien‘s original invention never made it into the box. Still, there is – as they say – something for everyone here: directions and maps for transforming your home into a Buddhist cave, an artist’s studio or a shopping mall; ‘notes to self’ that bear daily aphorisms; doorknob cards that warn visitors when you’re asleep or irritable.
According to Redstone, the Household Box is designed to make home life more interesting, dramatic and enjoyable. Whether it does all that depends on your sense of humour (and your design aesthetic). What it does guarantee is an unexpected and interesting response from anyone who uses it; no two families are likely to tackle it in the same way.
Cristina Ybarra 