El pasado día uno de noviembre se estrenó en el flamante auditorio de Fibes (cuyo arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra, también asistió al estreno) el musical «Los Miserables«. Este conmovedor musical basado en la obra de Victor Hugo tuvo anoche una grandiosa puesta en escena a cargo de Stage Entertainment. Espectaculares escenografías, cuidada y cambiante iluminación, creativos juegos de proyecciones se iban sucediendo escena tras escena en un espectáculo que iba in crescendo minuto a minuto sorprendiéndonos. Una obra clásica que además resulta edificante, donde los valores nobles triunfan. Las imágenes y montajes en escena me sugerían constantemente la posible inspiración de los creativos en las obras pictóricas de Vermeer al inicio, y de Gericault, Jacques Luis David, Delacroix, Goya, hasta guińos al impresionismo de Monet con alguna escena nocturna iluminada o a Rousseau con sus paisajes. Me pareció el montaje artístico de una gran profesionalidad, sensibilidad y detalle.
Me gusta ver por un lado que se interpreten los musicales en español, aunque no puedo evitar estar más acostumbrada a las versiones en inglés que me resultaron memorables. Sin embargo fue un magnífico musical con grandes figuras. Un gran reparto un muchísimas horas de trabajo detrás que se notaba, haciendo que se hicieran cortas las casi tres horas que duró. Impactante fue la última escena que cerró el telón. Todo estaba ensayado y estudiado, nada me pareció al azar, incluso la estética y cuidada manera de agruparse los 27 intérpretes al saludar. Éxito de público en el estreno de un magnífico musical que estará hasta el próximo 17 de noviembre.
Muy bueno el reparto con Ignasi Vidal, Eva Diago, Armando Pita, Talía del Val, Elena Medina. Magníficos estuvieron también Lydia Frailén, Nicolás Martinelli y Guido Balzaretti. Muy recomendable musical donde el buen gusto y el buen hacer quedó patente.